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sábado, 9 de noviembre de 2013

CONCLUSIONES SOBRE LOS MÉTODOS DE DECISIÓN DEL PRESUPUESTO DE CAPITAL

En este capítulo hemos expuesto cinco métodos de decisión para el presupuesto de capital. En esta exposición, hemos comparado los métodos entre sí para poner de relieve sus respectivos puntos fuertes y débiles, y a lo largo de tal proceso hemos creado probablemente la impresión de que las empresas "sofisticadas" deberían usar sólo un método en el proceso de decisión, el NPV. Sin embargo, virtualmente todas las decisiones de presupuesto de capital son analizadas por computadora, por lo tanto resulta sencillo calcular y hacer una lista de todas las medidas de decisión: el método del periodo de recuperación, el método del periodo de recuperación descontado, el NPV, y la IRR y la IRR modificada (MIRR). Al tomar la decisión acéptese/rechácese, las empresas más grandes y más sofisticadas, tales como la IBM, la GE y la General Motors, calculan y consideran estas cinco medidas porque cada una de ellas proporciona a quienes toman decisiones una pieza de información necesaria un tanto diferente.
El método del periodo de recuperación y el periodo de recuperación descontado proporcionan una indicación tanto del riesgo como de la liquidez de un proyecto: un periodo de recuperación prolongado significa 1) que los dólares de 1a inversión quedarán comprometidos durante muchos años, y por lo tanto el proyecto será relativamente líquido, y 2) que los flujos de efectivo del proyecto deben ser pronosticados hacia un futuro distante, y por lo tanto el proyecto será probablemente muy riesgoso. Una buena analogía de este tópico es el proceso de valuación de bonos. Un inversionista nunca deberá comparar los rendimientos al vencimiento sobre dos bonos sin considerar antes sus plazos al vencimiento, porque el grado de riesgo de un bono se ve significativamente influenciado por su vencimiento.
El valor presente neto es importante porque proporciona una medida directa del beneficio en dólares (sobre la base del valor presente) para los accionistas de la empresa; por lo tanto, consideramos al valor presente neto como la mejor medida individual de la rentabilidad. La tasa interna de rendimiento también mide la rentabilidad, pero aquí se expresa como una tasa de rendimiento porcentual, la cual parecen preferir un gran número de tomadores de decisiones, principalmente los administradores que no gozan de especialización en el área financiera. Además, la tasa interna de rendimiento contiene información acerca del "margen de seguridad" de un proyecto, lo cual no es una característica inherente al valor présente neto. Como ejemplo, considérense los dos proyectos siguientes: el proyecto P (donde P significa pequeño) cuesta $ 10 000 cuando t = 0 y se espera que reditúe $ 16 500 al final del año 1, mientras que el proyecto G (donde G significa grande) cuesta $ 10Ó 000 y tiene un rendimiento esperado de $ 115 500 después de un año. A un costó de capital del 10%, ambos proyectos tienen un valor-presente neto de $5000, por lo tanto, siguiendo la regla del valor presente neto, deberíamos ser neutrales entre los dos. Sin embargo, el proyecto P proporciona en realidad un margen de error mucho más grande. Incluso si sus flujos realizados de entrada de efectivo fueran casi un 40% inferiores al pronóstico de $ 16 500, la empresa aún recuperaría su inversión de $10 000. Por otra parte, si los flujos de entrada del proyecto G disminuyeran en sólo un 14% respecto de los $115 500 pronosticados, la empresa no recuperaría su inversión. Además, si no se generara ningún flujo de entrada, la empresa perdería tan sólo $10 000 con el proyecto P pero perdería $100 000 si tomara el proyecto G.
El valor presente neto no contiene información acerca del "margen de seguridad" inherente a los pronósticos de flujo de efectivo de un proyecto o acerca del monto de capital que se encuentra sujeto a riesgo, pero la tasa interna de rendimiento sí proporciona información acerca del "margen de seguridad": la tasa interna, de rendimiento del proyecto P es un colosal 65%, mientras que la del proyecto G es de sólo un 15.5%. Como resultado de ello, el rendimiento realizado podría disminuir sustancialmente para el proyecto P, y aún ganaría dinero. Obséryese, sin embargo, que la tasa interna de rendimien- to modificada tiene todasTas virtudes de la tasa interna de rendimiento, pero también incorpora el supuesto correcto de la tasa de reinversión, y evita el problema referente a las tasas de rendimiento de naturaleza múltiple. 
En síntesis, cada uno de estos métodos proporciona diferentes tipos de información para quienes toman decisiones. Ya que es muy fácil calcularlos, todos ellos deberían ser considerados en el proceso de la toma de decisiones. En el caso de cualquier decisión específica, se dará más peso a un método que al otro, pero sería tonto ignorar la información que proporciona cualquiera de estos métodos.

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