Los costes de transporte. ¿Cuáles son los costes de
transporte? El coste de transportar bienes voluminosos y
perecederos produce el mismo efecto que los aranceles,
reduciendo el grado de especialización regional beneficiosa. Por ejemplo, si cuesta 2$ por unidad transportar vestido
de Europa a Estados Unidos, el equilibrio de oferta y demanda seria el de la Figura 35 8, en la que el precio americano es 2$ superior al europeo.
Pero existe una diferencia entre la protección y los costes
de transporte: los costes de transporte son impuestos por la
Naturaleza es decir, por las distancias, las montañas y los
ríos mientras que los aranceles restrictivos son claramen
te responsabilidad de los países. De hecho, un economista
los ha llamado «ferrocarriles negativos». La imposición de
un arancel produce los mismos efectos económicos que tirararena a los motores de las embarcaciones que transportan a
nuestras costas bienes procedentes de otras tierras.
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sábado, 29 de noviembre de 2014
viernes, 28 de noviembre de 2014
Las barreras comerciales - II
El arancel no prohibitivo. Unos aranceles más moderados (menos de 4S por unidad de vestido) perjudicarían al
comercio, pero no lo ahogarían totalmente. La Figura 35-8
muestra el equilibrio en el mercado de vestido con un arancel de 2$. Suponiendo de nuevo que no hay costes de transporte, un arancel de 2$ significa que el vestido extranjero
se venderá en América a 6$ por unidad (igual al precio
mundial de 4$ más el arancel de 2$).
F1 resultado de equilibrio de un arancel de 2$ es una re
ducción del consumo interior (o de la cantidad demandada)
de 300 unidades correspondientes al equilibrio con libre
comercio a 250 una vez establecido el arancel, un aumento
de la producción interior de 50 unidades y una reducción
de la cantidad de importaciones de 100 unidades, liste
ejemplo resume el efecto económico de los aranceles:
Un arancel tiende a elevar el precio, a reducir las
cantidades consumidas e importadas y a aumentar
la producción interior.
Los contingentes. Los contingentes producen el mismo
efecto cualitativo que los aranceles. Un contingente prohibitivo (que impidiera todas las importaciones) lograría
el mismo resultado que un arancel prohibitivo. El precio
y la cantidad retornarían al equilibrio sin comercio del
punto A' de la Figura 35-8. Un contingente menos riguroso
limitacia las importaciones a 100 unidades de vestido- este
contingente sería igual a la línea discontinua HJ de la
gura 37-2. Un contingente de 100 unidades conduciría al
mismo precio y a la misma producción de equilibrio cinc el
arancel de 2S.
Aunque no existe ninguna diferencia esencial entre los
aranceles y los contingentes, sí hay algunas diferencias su
"les. Un arancel aporta ingresos al Estado, permitiendo tal
vez reducir otros impuestos y contrarrestando así parte del
daño causado a los clientes del país importador. Un contingente, en cambio, proporciona los Ixsnelicius de la diferencia
de precios resultante a los importadores que tienen la suerte de conseguir un permiso o una licencia para importar.
Esto
pueden agasajar o incluso sobornar a los funcionarios en
cargados de conceder las licencias de importación.
Como consecuencia de estas diferencias, los economistas
suelen considerar que los aranceles son menos perjudiciales
Sin embargo, si un gobierno está decidido a imponer contingentes, subasta las escasas licencias para establecer contingentes sobre las importaciones de modo que sea el Es la
do y no el importador o el exportador el que obtenga los
ingresos derivados del escaso derecho a importar; de esa
manera, la inirociaJa tampoco se sentirá tentada a asignar
los derechos por sobornos, amistades o nepotismo.
jueves, 27 de noviembre de 2014
Las barreras comerciales - I
Durante siglos, los gobiernos han recurrido a los aranceles
y a los contingentes para recaudar ingresos e influir en el
desarrollo de determinadas industrias. Desde el siglo xvm
—en que el parlamento británico intentó imponer aranceles
sobre el té, el azúcar y otras mercancías a sus colonias
americanas— la política arancelaria ha sido suelo fértil
para las revoluciones y las luchas políticas.
Para comprender los efectos económicos de los aranceles y los contingentes, podemos utilizar el análisis de oferta y demanda. En primer lugar, obsérvese que un arancel
es un impuesto sobre las importaciones. El Cuadro 35-2
muestra algunos aranceles representativos que existían en
los años ochenta en Estados Unidos y en Japón. A título de
ejemplo, Estados Unidos tiene actualmente un arancel de
«n 2,5 por ciento sobre los automóviles. Si un automóvil
extranjero cuesta 10.000S, el precio interior incluido el
arancel es de 10.250$. Un contingente es una limitación
de la cantidad de importaciones. Estados Unidos tiene contingentes sobre numerosos productos como los cacahuetes,
los textiles y el vacuno.
El arancel prohibitivo.
El caso más fácil de analizar es
el arancel prohibitivo, que es aquel que es tan alto que
ahoga totalmente los incentivos para importar. Volviendo a la Figura 35-7, ¿qué ocurriría si el arancel sobre el vestido
fuera superior a 4S por unidad (es decir, más que la diferencia entre el precio americano sin comercio de K.S y el
mundial de 4$)? Este arancel seria prohibitivo y ahogaría
todo el comercio de vestido. Cualquier importador que
comprara vestido al precio mundial de 4S podría venderlo
en América, a lo sumo, por el precio sin comercio de 8$.
Pero el arancel que habría de pagar el importador sería
superior a la diferencia entre el precio americano y el mundial. Por lo tanto, los aranceles prohibitivos matan todo el
comercio.
miércoles, 26 de noviembre de 2014
ANÁLISIS DEL COMERCIO Y DE LOS ARANCELES BASADO EN LA OFERTA Y LA DEMANDA - II
El equilibrio en ausencia de comercio.
Supongamos
que los costes de transporte o los aranceles del vestido
fueran prohibitivos (por ejemplo, de 100$ por unidad de
vestido). ¿Dónde se encontraría el equilibrio sin comercio?
En este caso, el mercado americano de vestido se hallaría
en la intersección de la oferta y la demanda nacionales, representada por el punto N de la Figura 35-7. En este punto
sin comercio, los precios serían relativamente altos, 8S por
unidad, y los productores nacionales satisfarían toda la demanda.
Libre comercio. Abramos ahora el comercio de vestido.
En ausencia de costes de transporte, de aranceles y de contingentes, el precio de América debe ser igual al mundial.
¿Por qué? Porque si fuera superior, los empresarios astutos
comprarían donde el vestido fuera barato (Europa) y venderían donde fuera caro (América): es decir. Europa exportaría vestido a América. Una vez que los flujos comerciales se hubieran adaptado totalmente, el precio americano
sería igual al mundial. (En un mundo con costes de transporte y aranceles, el precio de América sería igual al precio
mundial ajustado para tener en cuenta estos costes.)
-
La Figura 35-7 muestra cómo se determinan los precios. las cantidades y los flujos comerciales en este ejemplo
del vestido con libre comercio. La recta horizontal correspondiente a 4$ representa la curva de oferta de importaciones; es horizontal, o sea, perfectamente elástica respecto al precio, porque se supone que la demanda americana
es demasiado pequeña para influir en el precio mundial
del vestido.
Una vez abierto el comercio, entra una comente de importaciones en América, reduciendo el precio del vestido
hasta que es igual al precio mundial de 4$ por unidad. En
ese nivel, los productores nacionales ofrecen la cantidad
ME. o sea, 100 unidades, mientras que los consumidores
desean comprar 300.
La diferencia, representada por la línea
discontinua EF, es la cantidad de importaciones. ¿Quién ha
decidido qué América importara precisamente esa cantidad
de vestido y que los productores nacionales sólo ofrecieran
1(X) unidades? ¿Una agencia europea de planificación? ¿Un
cartel de empresas de confección? No, la cantidad de comercio ha sido determinada por la oferta y la demanda.
Podemos decir, además, que en el equilibrio sin comercio
el nivel de precios determina la dirección de los (lujos comerciales.
En ausencia de comercio, los precios americanos
eran más altos que los europQos, por lo que entraban bienes
en América. Recuérdese esta regla paradójica: en condiciones de libre, comercio, los bienes fluyen de los lugares en los
cuales ¡os precios son bajos hacia los lugares en los cuales
son altos. Cuando se abren los mercados al libre comercio,
el vestido fluye del mercado europeo en el cual los precios
son bajos al mercado americano en el cual son altos
martes, 25 de noviembre de 2014
ANÁLISIS DEL COMERCIO Y DE LOS ARANCELES BASADO EN LA OFERTA Y LA DEMANDA - I
Libre comerciq1 o ausencia de comercio
La leona de la ventaja comparativa puede aclararse por
medio de la oferta y la demanda de bienes en el comercio
exterior. Consideremos solamente el caso del mercado de
vestido de América. Supongamos para facilitar el análisis
que América constituye una pequeña parte del mercado,
por lo que no puede influir en el precio mundial del vestido. (Este supuesto nos permitirá analizar con suma facilidad la oferta y la demanda: el caso más realista en el cual
un país puede influir en los precios mundiales se analizará
más adelante en este capítulo.)
1 ,a Figura 35-7 muestra las curvas de oferta y demada de
vestido de América.
La curva de demanda de los consumidores americanos es la DD y la curva de oferta interior de
las empresas americanas es la SS. Suponemos que el precio
del vestido es determinado en el mercado mundial (se supone que éste es mucho mayor que el americano) y que es
igual a 4$ por unidad.
Aunque en el comercio internacional
las transacciones se realizan en diferentes monedas, de
momento podemos simplificar convirtiendo la curva de
oferta expresada en moneda extranjera en una curva de
oferta expresada en moneda nacional, utilizando el tipo de
cambio actual.
viernes, 14 de noviembre de 2014
EL PROTECCIONISMO
La teoría de la ventaja comparativa muestra que los países
pueden beneficiarse de la especialización y de la división internacional del trabajo. A pesar de estas observaciones económicas establecidas, los parlamentos se ven asediados continuamente por grupos que presionan para que se adopten
medidas «proteccionistas» consistentes en aranceles o en
contingentes sobre las importaciones. En Estados Unidos,
existe una disputa permanente entre el Congreso y el presidente sobre la conveniencia de aprobar medidas que protejan las industrias nacionales de las importaciones baratas.
¿l-s el proteccionismo una política económica sensata?
Los economistas generalmente están de acuerdo en que
no lo es ("tven que el libre comercio fomenta una división
del trabajo entre los países que es mutuamente beneficiosa
y de que el 1 ornen 10 libre y abierto permite a cada país auincntni mi piodueeion y mis posibilidades de consumo, elevando el nivel de vida del mundo.
Pero muchas personas discrepan de esta afirmación. Lo
mismo que Alexander Hamilton quería levantar muros arancelarios en torno a las industrias manufactureras de
Estados Unidos en 1789, actualmente algunas personas
sostienen que es necesario proteger las industrias de la competencia extranjera.
jueves, 13 de noviembre de 2014
MATIZACIONES Y CONCLUSIONES
Con esto darnos por concluido nuestro análisis de la elegante teoría de la ventaja comparativa. Sus conclusiones se
aplican a cualquier número de países y de mercancías.
También puede generalizarse para abordar los casos en los
que hay muchos factores, en los que varían las proporciones de factores y hay rendimientos decrecientes.
Pero la ventaja comparativa tiene sus limitaciones. Su
principal defecto se encuentra en sus supuestos clásicos,
pues supone que la economía competitiva funciona fluidamente, que los precios y los salarios son flexibles y que no
hay desempleo involuntario. ¿Se cumpliría también la teoría
si los trabajadores del automóvil, suspendidos de empleo
al aumentar rápidamente Ja proporción de automóviles japoneses vendidos en el mercado norteamericano, no pudieran encontrar trabajo fácilmente? ¿Qué ocurriría si la sobrevaloración del tipo de cambio del dólar redujera la
demanda de obreros industriales y éstos no pudieran encontrar un empleo parecido en otros sectores? En esos casos, el
comercio podría muy bien desplazar a un país a puntos situados por debajo de su FPP al aumentar el desempleo y
disminuir el PIB.
Cuando la economía se encuentra en una
depresión o funciona mal, no podemos estar seguros de que los países se beneficiarán del comercio o de que la teoría de
la ventaja comparativa se cumplirá en todos los casos.
Dada esta matización, apenas cabe extrañarse de que
teoría de la ventaja comparativa tenga menos defensores durante los períodos de grandes perturbaciones macroeconómicas. Durante la Gran Depresión de los años treinta, al aumentar el desempleo y disminuir la producción real, l0s
países levantaron grandes muros arancelarios en sus fronteras por lo que el volumen de comercio exterior disminuyó acusadamente.
La ventaja comparativa recuperó su prestigio en el
período posterior a la Segunda Guerra Mundial, debido a
que la integración económica de los países industriales modernos condujo a un período de crecimiento económico sin
precedentes.
Pero en todas las recesiones el trabajo y el capital subutilizados presionan pitra que se protejan sus mercados de la competencia extranjera. Estas épocas de la historia nos recuerdan que la teoría clásica de la ventaja comparativa sólo es estrictamente válida cuando los tipos de cambio, los precios y los salarios son adecuados y cuando la política macroeconómica elimina los grandes ciclos económicos o las perturbaciones comerciales del panorama económico.
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