Durante el periodo 1979-1984, se vendió una gran cantidad de deudas a largo plazo a
tasas de interés que ascendían hasta el 18 por ciento en el caso de las compañías
catalogadas como doble A. Debido a que el periodo de protección contra el reembolso
de gran parte de estas deudas había terminado, o terminaría muy pronto, muchas
compañías estaban analizando los pros y los contras de los reembolsos de bonos. En la
realidad, las decisiones de reembolso implican dos preguntas que se formulan en forma
separada: 1) ¿sería rentable el reembolsar una emisión en circulación en el periodo
actual y reemplazarla por una nueva emisión? y 2) aun si el reembolso fuera actualmente
rentable, ¿incrementaría aun más el valor esperado de la empresa si el reembolso se
pospusiera hasta una fecha posterior? En este apéndice daremos consideración a ambas
preguntas.
Obsérvese que la decisión de reembolsar un valor se analiza en una forma muy
parecida a la decisión de presupuesto de capital. Los costos del reembolso Oos
desembolsos de la inversión) consisten en: 1) la prima de reembolso pagada por el
privilegio de reembolsar la emisión antigua, 2) los costos resultantes de vender la nueva
emisión, 3) los ahorros fiscales resultantes de cancelar los costos de flotación no
erogados sobre la emisión antigua y 4) el interés neto que deba pagarse mientras ambas
emisiones están en circulación (la nueva emisión se vende frecuentemente un mes antes
del reembolso para asegurarse de que los fondos estén disponibles). Desde el punto de
vista del presupuesto de capital, los flujos anuales de efectivo corresponden a los pagos
de intereses que se ahorran cada año más los ahorros fiscales netos que la empresa
recibe por la amortización de los gastos de flotación. Por ejemplo, si los gastos de
intereses sobre la emisión antigua son de $1 000 000 mientras que los de la nueva
emisión son de $700 000, la reducción de $300 000 en ahorros de intereses constituye
un beneficio anual.
El método del valor presente neto se utiliza para analizar las ventajas del reembolso:
los flujos futuros de efectivo se descuentan al presente, y posteriormente este valor
descontado se compara con los desembolsos de efectivo asociados con el reembolso.
La empresa debería reembolsar el bono solamente si el valor presente de los ahorros
excede al costo (es decir, si el valor presente neto de la operación de reembolso es
positivo).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario